Extracto de la oración de Alejandro Escobedo:
Esto no es entretenimiento, explosión juvenil no es entretenimiento, son momentos de colaboración con el Espíritu Santo. Para que El cumpla sus proyectos y propósitos en nuestras vidas. ¡No lo sueltes, clama, clama hasta desmayar, clama, clama, clama! Veo esos espíritus de hechicería, de religión, espíritus de muerte, lárgate en el nombre de Jesús. Vete, largo, de los jóvenes, de sus mentes, de sus corazones. Es en Tu nombre Jesús, es en Tu nombre. Invocamos el nombre de Cristo Jesús, Él ungido libertador, Dios de toda la tierra y de toda carne. Confesamos que Jesucristo es el Señor que Él vino en carne y sangre. Que murió en la cruz del calvario y derramó su sangre para limpiarnos del pecado y resucitó al tercer día de entre los muertos por el poder del Espíritu de Dios y ahora está actuando. Ahí está tu libertad, libre, libre, rompe esa pesadez, rompe esa atadura, sácala. Te está liberando el Espíritu Santo, sí, Él lo está haciendo, experiméntalo, tómalo, abrasa la gracia de Dios. Pecados a los cuales estabas atado, ¡no más! Se rompen cadenas, se están rompiendo maldiciones ancestrales, vicios, patrones de pensamiento, inseguridades. Espíritu de temor, espíritu de temor, de inseguridad, espíritu engañoso a la mente, al corazón, que dice que no hay destino para mí en Dios, mentiroso diablo, lárgate. Confesamos la gloria de Dios en nuestras vidas. Nos confesamos, nos declaramos en la luz, en la luz de Cristo. Suelta a los jóvenes diablo, lárgate en el nombre de Jesús, el Espíritu de Dios está aquí, el mismo Espíritu que puso el orden en el desorden en el principio, el mismo Espíritu que resucitó a Jesús de los muertos. Te está liberando, nos está liberando. Soy libre por el nombre de Cristo y por la obra dela cruz, y por la obra del Espíritu Santo. ¡Oren en lenguas! No te asustes, es Dios y su violencia, y su indignación que está aquí sobre espíritus que atan a su pueblo, porque Dios se complace en libertad a los cautivos. Alza tus manos, alza tus manos, escucha bien, sigue orando en lenguas. Ora en lenguas lo más fuerte que puedas. Lo más fuerte que puedas. Espíritus de religión, engañosos, mentirosos, largo en el nombre de Jesús, largo en el nombre de Jesús. Está abriendo brecha el Espíritu Santo en ti también, en mí, para depositar su verdad. Ora en lenguas, si no tienes lenguas, recibe el bautismo en el Espíritu Santo. Más, más, más, mas, ahí hay libertad, ahí hay libertad. Todas las brujerías se rompen, todas las hechicerías se rompen. Toda la tristeza, los temores se van en el nombre de Jesús. Se establece el reino de Dios en los corazones, en las mentes. Este es el ruido que conecta, que trae el cielo a la tierra, este es el sonido de los santos de Dios.
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